A grandes rasgos, existen dos categorías de tipo de color: los fríos y los cálidos. Hablamos en este caso del tono de la piel, no del color de piel. Es decir, tú y tu amiga podéis tener un color de piel distinto, pero sin embargo podéis ser del mismo tipo de color. ¿Tu tono es rojo o rosado? Entonces, eres del tipo frío. ¿Tu piel tiende más bien hacia el amarillo o el marfil? Entonces, eres del tipo cálido.
¿Te resulta difícil determinar tu tipo de color? Entonces, mira la parte interior de la muñeca. Si tus venas son más bien verdosas, entonces eres del tipo cálido. Si tienden más bien hacia el azul, entonces eres del tipo frío.
¡Pero no basta con determinar únicamente el tipo de color! El color de los ojos y el pelo también determinan el perfil que te sienta mejor. Y claro está, ¡cada perfil tiene una gama de colores que le sientan a la perfección! Sigue leyendo y descubrirás a través de cuatro prácticas tablas cuál es tu tipo: primavera, verano, otoño o invierno.
Cálido | Tipo primavera
El tipo primavera se reconoce en primer lugar por el tono amarillo o marfil cálido. Los tipos primavera se reconocen a menudo por sus destellos dorados en el pelo y la piel. ¿Eres del tipo primavera? ¡Qué suerte! Porque el tipo primavera tiene un aspecto fresco y joven, e incluso con el paso de los años, mantiene este aspecto juvenil.
En general, los tipos primavera tienen ojos azules, azul grisáceo o verdes con destellos dorados en el iris. Otra característica de los tipos primavera es que a menudo tienen pecas. ¿tienes el pelo rubio natural? Entonces tienes muchas posibilidades de ser del tipo primavera. Pero si tu pelo tiende un poco más hacia el rubio oscuro, también puedes ser del tipo primavera. En este caso, tus colores son el amarillo vainilla, el rosa coral, el rojo mandarina y el turquesa, ¡pero también te favorecen el camel y el tostado!
Los colores fríos, como el fucsia y el rosa pastel no te sientan bien. Asimismo, el negro y el blanco son colores que deberías evitar. Son colores demasiado fuertes para tu piel y te apagarían el rostro. Sin embargo, ¿te gusta vestir estos colores? Procura entonces que estos colores no estén muy cerca del rostro. Por ejemplo, puedes combinar un top negro con una cazadora tejana o un pañuelo de colores cálidos y claros que te harán brillar.
Frío | Tipo verano
El tipo verano es, al contrario del tipo primavera, un tipo frío. Esto significa que tu piel tiene un tono rosado o rojo, tus ojos van del azul al gris verdoso y que tu pelo tiende más hacia un tono frío, como el rubio ceniza o el castaño ceniza. Debes tener un poco de cuidado con tu piel clara, porque, aunque tu tipo sea el tipo verano, puedes quemarte rápidamente al sol.
¿Te reconoces en este perfil? Entonces, ¡hay toda una gama de colores que no deben faltar en tu armario! Elige colores que - al igual que tu piel y tu pelo - sean fríos. Piensa, por ejemplo, en los colores pastel con un tono azulado, como el azul hielo, la verde menta y el rosa claro. Los tonos violetas también harán brillar tus ojos y darán a tu piel clara un resplandor cálido. ¿Tienes una fiesta y quieres brillar aún más? Entonces ponte un pintalabios rojo con un tono azul rosado, como el fucsia o la frambuesa. Procura no elegir un tono demasiado oscuro.
¿Qué colores es mejor evitar? Beige, dorado, naranja y negro; estos colores, en general te darán un aspecto un poco pálido. Pero aquí también vale lo mismo: mientras estos colores no estén muy cerca de tu rostro, ¡puedes llevarlo todo!
Cálido | Tipo otoño
Los tipos primavera y otoño pertenecen a la misma familia. La gran diferencia entre estos dos hermanos es que el tipo otoño es un poco más oscuro, mientras que el tipo primavera tiene un brillo más claro.
Si eres del tipo otoño, al igual que el tipo primavera, tu tono de piel tiende al amarillo. Además, ¿tu pelo es rubio rojizo a rojo o castaño en combinación con ojos verdes cálidos o color café? Entonces, ¡casi seguro que eres del tipo otoño! Mucha gente cree, o quizá sea mejor decir "espera", ser del tipo otoño, porque los colores que favorecen este tipo suelen los colores que nos atraen.
Lo que te queda mejor es llevar tonos cálidos. Los colores que te favorecen más los encuentras en la naturaleza, sobre todo durante el otoño: amarillo dorado, rojo oscuro, terracota y verde claro. ¡Qué suerte! Porque estos colores regresan de nuevo la próxima temporada en las nuevas colecciones.
Los colores que te conviene evitar son los colores fríos, como el verde menta, el azul pastel y el fucsia.
Frío | Tipo invierno
El tipo invierno es en realidad la variante oscura del tipo verano. ¿Tienes una piel rosa claro a marrón oscuro con un tono azul y el pelo oscuro? Entonces, eres del tipo invierno. El contraste entre tu piel, tu pelo y tus ojos es muy grande. ¿Te has preguntado alguna vez por qué la gente cree que tienes un carácter fuerte? ¡Esto puede deberse a tu aspecto enérgico e intenso!
Siendo del tipo invierno puedes hacer contrastes de colores. Colores claros, como el rojo, el verde y el azul cobalto te sientan muy bien. También el color negro te puede quedar bien.
Los tonos naturales, que tan bien le sientan al tipo otoño, mejor olvidarlos. El naranja y el amarillo suave también pueden hacerte parecer un poco pálida, ¡salvo que optes por un variante neón!